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Si tu hijo es un niño aventurero y divertido deberías optar por armarle una habitación en azul y amarillo, tal como la que te mostramos a continuación.
Dentro de la paleta de colores estos tonos resaltan y combinan a la perfección. Ten en cuenta que si decoras de esta manera el dormitorio de tu peque puede que no necesites invertir en vinilos de personajes animados o en guardas pasadas de moda para resaltar habitación. Estos colores cumplen a la perfección con esa premisa.
Colores veraniegos que alegran el ambiente
Para poder conseguir un sano equilibrio entre la estética y la funcionalidad es necesario que respetes cada detalle que hace a la habitación. Si bien en la imagen superior se ven algunos verdes y rojos en el ambiente, al mirar el dormitorio sin dudas, resaltan el amarillo y por sobre todo el azul.
Estos dos colores le dan personalidad a la habitación, volviéndola más varonil, amplia y cómoda. El azul pantone es un tono apropiado para dormitorios por su efecto en las personas. Se conoce que logra un sentimiento de equilibrio y serenidad, invitando al descanso a los peques.
Por otro lado, el amarillo hace el contraste perfecto. Es un color vivaz, actua perfecto como componente. Se puede aplicar en sillas, cojines, muebles, cortinas, camas, sábanas, ect.
Amarillo y azul, según el Feng Shui
El Feng Shui dice que los colores que usamos en los ambientes nos llevan a encontrar el equilibrio correcto. Del color azul dice que ayuda a promover el desarrollo de la juventud y el estudio. Según este sistema chino, este tono evoca la verdad, las buenas ilusiones y la perseverancia. Es símbolo de paz y calma.
Mientras que el amarillo, simboliza al sol y es un color que inspira el conocimiento. Representa alegría, creatividad y claridad mental.
Juntos el amarillo y el azul harán que tu hijo sea un niño con sabiduría y lo motivarán a crecer en un espacio donde primen las buenas vibraciones y deseos.